viernes, 17 de marzo de 2017

MUROS

Al ilustre científico inglés Isaac Newton corresponde la frase que a continuación voy a citar  y que  dice lo siguiente: " Los hombres construyen demasiados muros y no suficientes puentes". No tengo atisbo de duda alguna en corroborar este enunciado por su incuestionable veracidad y por la reflexión a la que nos lleva su implícito mensaje. Según mi criterio y ateniéndome a la fecha del nacimiento de su autor, 25 de diciembre de 1642,  bien pudiera haberlo    escrito supuestamente  a finales del siglo XVII. Por tanto, este arcaico enunciado indica con notoria evidencia que el instinto de levantar muros entre personas o pueblos viene siendo una terrible practica que se remonta a muchos siglos antes de que este científico  lo redactara.  Un palmario ejemplo es la Gran Muralla china edificada como protección contra los ataques de los nómadas del Norte y que comenzó a construirse en el siglo V a C. Desde la edificación de esta gigantesca muralla hasta el día de hoy, por desgracia se continúan proyectando nuevas construcciones  que desgarran y dividen comunidades y familias y aíslan culturas y religiones. Resulta muy descorazonador el hecho de que en dos décadas el mundo haya pasado a tener de dieciséis muros a los sesenta y cinco que en la actualidad están finalizados o en espera de su edificación. Entre esa  futurible cimentación se encuentra el controvertido muro que hipotéticamente planea levantar el energúmeno y retrógrado presidente de los Estados Unidos Donald Trump, con el propósito de frenar la incontrolada migración desde México. Al que por cierto, con la chulería y la prepotencia que le caracteriza, se jacta en decir que van a ser los propios mexicanos quien lo van a costear.  Otros infames muros en cambio hace ya varios años que fueron construidos y ahí permanecen levantados para  vergüenza de la humanidad. Uno de ellos es    es el que comenzó a levantar Israel en el año dos mil dos en Cisjordania con la excusa de frenar los ataques terroristas, pero que a la postre lo único que hace es aislar a la población de Palestina. Tristemente este país, hablo de España, también tiene su particular muro en forma de ignominiosas vallas y que están instaladas con sus peligrosas concertinas en Ceuta y Melilla como medida disuasoria que frene el paso de los emigrantes de África a Europa.   Ante la gran influencia de los desesperados refugiados  que huyen de la guerra, el hambre, el miedo, etc. y que llegan al viejo continente en busca del bienestar y la libertad, países como Hungría o Austria se han mostrado hostiles a su masiva llegada y por esta razón han levantado en sus fronteras una muralla de alambres y cuchillas con el fin de que  obstaculicen la entrada a su territorio. Luego también están esos otros muros que no se ven, pero que se pueden intuir con toda certeza; me estoy refiriendo a los muros invisibles que los politicastros tratan de levantar con sus arengas secesionistas y que en mi modesta opinión no deja de ser otra forma sibilina más de dividir pueblos y personas.
 
 


Y así un suma y sigue de muros y más muros; unos  en proyecto de construcción, otros  perpetuándose en el tiempo  como en el caso del  de Marruecos que fue edificado en la década de los ochenta  del siglo pasado en pleno desierto saharaui para defenderse de las incursiones del Frente Polisario. Se trata de uno de los más extensos del mundo y a su vez de los más peligrosos por el campo de minas que tiene en sus proximidades. Para nuestra desgracia,    continúan multiplicándose todos estos muros que nos aíslan y  separan, pero no solamente de manera física, si no también cultural. Mucha culpa de que  sigan incrementándose la tienen  políticos indeseables con manifiesta  tendencia fascista como es el caso de Donald Trump en Estado Unidos,  o la ultraderechista Marie Le Pend en Francia, que lanzan constantemente  todo tipo de soflamas de inseguridad con el único pretexto de poder seguir levantándolos para que nos protejan de los otros; de los diferentes. El concepto que personalmente tengo sobre esta cuestión, es que los muros crean espíritu de exclusión, de conflictos, y puede acabar creando  una guerra larvada o no. Además no dejan de generar o sumar odio y resta al ser humano prosperidad. Considero a día de hoy una  autentica quimera creer que los muros pueden controlar los flujos de los inmigrantes. Seguirán fluyendo de continuo por la necesidad, la libertad o la busca del bienestar. Nada ni nadie podrá frenar el impulso vital de quien nada tiene que perder excepto la vida, por este motivo su única salida siempre será una huida hacia adelante. Por ende, va a resultar inútil el que los sigan construyendo, aunque equivocadamente continúen en sus treces de levantarlos a lo largo y ancho del Planeta y todos ellos con análogos propósitos. No recuerdo ahora quien fue el que dijo que los muros es la mejor manera de no hacer nada dando la impresión de hacer algo.  A mi criterio,  deduzco por este comentario que por la incapacidad de encontrar decisiones consensuadas, se acaba admitiendo la  falta de soluciones que puedan acaba por otros medios más razonables  la compleja problemática de la inmigración. Resulta deprimente a más no poder, el que la única alternativa hallada para solucionar este  problema sea la instalación de  muros que nos aíslen y maten la comunicación, cuando de lo que se trata es de derribarlos y no edificar otros nuevos. Por contra, lo que verdaderamente resulta necesario construir son puentes que hagan posible el que estemos en excelente integridad con las personas a fin de sentirnos cada vez más unidos como ciudadanos del mundo que somos y no aislados individual y globalmente por muros que no sirven absolutamente para nada. Es por tanto que se hace perentorio derribarlos cuanto antes, tal como se hizo en su día con el tristemente muro de la vergüenza que la antigua Unión Soviética  construyó en  Berlín y  que  continúen  cimentándose el mayor número posible de  puentes con el fin de que  nos permitan seguir  relacionándonos todos los seres humanos. Ésta será la única forma de que podamos compartir  los imprescindibles valores universales y propagar nuestros horizontes 

sábado, 11 de marzo de 2017

CON VOSOTROS


CON VOSOTROS

 In memorian,  decimo tercer aniversario de la masacre de Atocha
( Madrid,  4 de marzo de 2004)



                          
 
¡¡ 11 -M,   NI OLVIDO NI PERDON...

Con mi voz quebrada hasta aquí vengo,
a esta hora en que el dolor me convoca.
Mi recuerdo en un profundo vacío
que sólo de vuestra ausencia se llena.
Aquí estoy, con este jirón de muerte
que ya se ha encadenado al futuro.
Me quedo con vosotros que habitáis
la memoria tatuada en el corazón de Madrid;
ciudad que aún por sus sus cicatrices llora:
sus lágrimas son improvisados andenes
a  donde los trenes de la Apocalipsis llegan
y el amanecer  se hace un duelo de campanas
repicando su tristeza que por el aire se pierde.
Ahora en silencio esta breve elegía escribo
para que el empeño de mi evocación consiga
salvaros de la amnesia del tiempo y os regrese
a este espacio donde vuestra luz se expande,
aunque las sombras del olvido siempre acechan.
Porque aquí todo es oscuro,  nada ha cambiado, 
los anti hombres continúan  vomitando su odio,
 y a vuestros nombres, quienes han sido culpables
bajo su inmortal  pátina de infamia los ocultan



...QUE LA HISTORIA CASTIGUE A LOS CULPABLES!!
 
 
 
(11, de marzo de 2017)